el dìa en que partiste.
Y ese amor inmenso que nos unio
en la tierra, sigue conectado
con ese hilo invisible
desde el cielo hasta
la tierra.
Sé, que lo que esta en la tierra
al cielo pertenece y, que
solo somos prestados
como compañia o, para cumlir
una mision que Dios nos a
encomendado y cuando
Él Padre Celestial nos
llama, debemos partir con el alma
desnuda, dejando todo y el
cuerpo en la sepultura.
Y los que aqui quedamos, con la fé
puesta en Cristo, haciendo siempre su
santísima voluntad sin mas
recompensa que lo vivido y disfrutado
con ese ser querido que Dios
llamo a su presencia.
Pero eso no deja de ser triste
traumatico y doloroso.
Debemos pedir fuerzas y fortaleza
Al Padre para hacer siempre
su santa voluntad
Y darle gracias por el tiempo vivido
y compartido con los seres queridos
y amados que Él, puso en
nuestro camino.
O, que envìo a nuestros hogares
para felicidad mutua.
Que se haga tu santa voluntad
Y bendita sea por siempre
Señor... Amèn.
Maye.
