Al cerrar mis ojos... contemplo tu silueta... Si los abro, te has marchado ya... Cuando duermo, en sueños te acaricio, al despertar, solo tu recuerdo esta. Pero te sigo amando... y que no me olvides nunca le pido a Dios. Aunque mis brazos se sequen y caigan, cansados ya de esperar, ese amor que por ti siento, nunca se marchitara. Si perdí a mi santa madre, y ahora lo pierdo a él, estoy perdiendo al que amo y tambien te pierdo a ti. Para que seguir así, si, a quien mas yo he querido, no los tengo junto a mi.
Maye.
|