Señor... Tu que estás, en el cielo que ves mi tristeza que ves mi dolor. Señor... Yo te pido que acudas a darle remedio a esta situación. No ves que me muero de a poco y ya casi me falta la respiración. Señor... Ten piedad de esta alma que un día, te entregue a Ti, mi Señor. Señor... No dejes que salte, que caiga y reviente, ten compasión. Que yo de rodillas te alabo, te entrego mi vida, a Ti mi Señor.
Maye.
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