Aquí estoy de nuevo, amigo imaginario, deseando compartir este dolor. Tu que sin reproches sueles escucharme y comprendes la triste situación. Oh, amigo imaginario, como quisiera que estubieras a mi lado diciendome al oido... "apoyate en mi hombro y llora sin temor"... Refugiate en mis brazos que yo estaré a tu lado, los tiempos venideros suelen ser mucho peor. Oh, amigo imaginario, las luz de un nuevo día, se junta con un nuevo atardecer, las años pasan, el tiempo se va, pero las penas en mi alma quedaran. Cuando al final del camino te sientas sola... agobiada y el llanto insista en regresar, mira hacia arriba... dame tu mano, tu amigo imaginario jamás te dejara.
Maye. |
2 comentarios:
Llega al alma tu poema, ese amigo imaginario existe, tal vez lejos, mi querida Maye pero siempre unidos por la alegría o dolor, el espíritu es más fuerte que el cuerpo y no importan distancias que le impidan llegar. Que así llegue mi hombro donde puedas llorar y luego a luchar de nuevo, no te rindas. Un fuerte abrazo y un mejor año para ti y tu familia. Tu amiga Martha.
Gracias recordada Martha, hace ya algunos años que la tristeza unió nuestra amistad y nos sigue uniendo en el dolor. Tu comprensión y el apoyo que me brindas desde un lugar de este mundo, son muy valiosos. Abrazos y que Dios bendiga a ti y a tu familia.
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