A los seres que amé y, ya no están conmigo. Pero aunque ya no estén los sigo amando. A mis abuelos, a mi amada madre mis tíos, mi sobrino y demás familiares. Al igual que, a mis queridos amigos, que partieron en el tren sin regreso. A ese tren... al que todos subiremos algún día, para continuar el viaje y atravesar el túnel, a lo desconocido. Solos, atrás quedaran familia y amigos, al igual que aquellos enseres que con afán acumulamos. Pero... nos olvidamos de vivir por tener y poseer, dejando para después el descanso y el placer. Pero solo Él Señor sabe dónde como y cuando, termina nuestro camino y allí entregaremos todo y, seguiremos así... como nacimos.
Maye.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario