Parece que en este mundo
de distintas condiciones
lo más que nos interesa es el
dinero a montones.
El que no compra la vida, pero
si compra corazones.
Todos debemos partir cuando
nos llegue la hora
pero otra cosa es vivir, contando
siempre la horas, que nos quedan
por vivir, le dijo el ego a la
Aurora.
Ya no veré más tu brillo
resplandecer en mi alcoba, ni
veré más el sol, coquetearle
a las señoras .
No podre disfrutar de la lluvia
refrescante, que riega los verdes
campos y la tierra encantadora.
No veré más las rosas, al abrir
sus pétalos fragantes a un nuevo
día, ni la risa de los niños
rebosantes de alegría.
Le dijo el ego a la Aurora, me voy
para no volver, tengo los días
contados y aunque no quiera
marcharme se que tengo
que partir.
Atrás quedo todo aquello, por lo
que un día luche; solo la mortaja
llevo y el amor que recibí.
De que sirvió luchar tanto!!!
Para que vivir así!!!
Si el amor más importante
huidizo fue de mi.
"Su amor costaba dinero...
y yo, no lo conseguí".
Mejor morir con su desprecio
y no, con su compasión.
Maye.
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